La vida de Joaquín Torres García: Biografía

Joaquín Torres García nació en Julio de 1874 en Montevideo, Uruguay. Fue un pintor, escritor y maestro, entre todo un autor “auto marginalizado”, que se caracterizó por haber elaborado un sistema estético-filosófico llamado Universalismo constructivo, basado en principios de unidad, estructura y proporción. 

Pero antes de llegar a crear su obra más importante, se enriqueció con las experiencias de vida en diferentes partes del mundo, pues desde temprana edad se mudó de su país natal. Para hablar de la vida de Torres García, he visto que en la mayoría de sus biografías hacen una separación meticulosa de la ciudad donde residió y los acontecimientos de su vida referentes a su recorrido artístico, además de los años de estadía antes de mudarse nuevamente. Así que voy a tratar muy someramente la vida de este artista resaltando los hechos más importantes y utilizando tal método.
En el libro de Adolfo M. Maslach “Joaquín Torres García. Sol y luna del arcano”, he encontrado un esquema que describe la ciudad en la que el artista reside y su tiempo de afianzamiento relacionado con la edad, que me parece muy afortunado ya que nos permite ubicarnos cronológica y espacialmente en su vida. Voy a transcribirlo a manera de esquema:
 
Créditos a Adolfo M. Maslach “Joaquín Torres García. Sol y luna del arcano
 Maslach aclara que esto es importante para no encasillar erróneamente a Torres García en circuitos o movimientos plásticos. Otra cosa que cabe destacar es que él menciona ciertas condiciones sociopolíticas y económicas por las que (a una escala muy general) está viviendo cada uno de los países que atraviesa nuestro artista, así señala; el Liberalismo de Montevideo a principios de la vida de Joaquín, la Barcelona nacionalista, el imperialismo en Nueva York, el fascismo en el Mediterráneo, el colectivismo en París, la Madrid totalitarista y la democracia en Montevideo al final de sus días. A mi parecer esto es importante para entender el contexto en el que vivió el artista uruguayo y cómo esto incidió de cualquier manera su vida.

Ahora a la parte concreta de su biografía. Joaquín Torres García, nace en Montevideo el 28 de Julio, de padre catalán y madre uruguaya con ascendencia canaria. Joaquín pasó mucha parte de su infancia en el almacén de su padre y el taller de carpintería de su familia, cortando y ensamblando piezas obtuvo una habilidad que más tarde utilizaría en su proceso artístico. Era un buen lector y observador. Debido a una frágil situación económica, su familia se embarca rumbo a Barcelona en 1891

En España es donde transcurre su juventud y los primeros años de su adultez. Aprende el catalán e ingresa a la Escuela Oficial de Bellas Artes de Barcelona, donde toma clases de dibujo y también asiste a la Academia Baixas donde se inicia en la pintura, según él “aprende los trucos del mal pintor”. Ya en 1896 ha realizado ilustraciones para diferentes revistas y carteles de anuncio, y ha realizado varias exposiciones de Bellas Artes con su dibujos y acuarelas. Un año después un periódico de Barcelona reproduce uno de sus dibujos a lápiz “La compra de turrones”. 

Fragmento del friso “La compra de turrones” por J.T.G (1897)
Continuando, en 1904 – 05, trabaja con Antonio Gaudí en los vitrales para la reforma de la catedral de Palma de Mallorca y de la Sagrada Familia, de Barcelona. Con uno de sus compañeros de trabajo de la Catedral de Mallorca, realiza una exposición apoyada por la crítica especializada. Los siguientes años se interesa por los primitivos italianos y el arte Helenístico. Se inicia en el muralismo, pintando en iglesias y la estancia del ayuntamiento de la ciudad, pero recibe varias críticas y genera descontentos. Posteriormente todos estos frescos serán destruidos. 

Imagen tomada de “Torres García.
Pasión Clásica”
por  Joan Sureda Pons.
Ediciones Akal 1998.
De 1909 a 1916, Torres ya ha contraído matrimonio con Manolita Piña y su primera hija ha nacido. Su admiración por Puvis de Chavannes crece cuando viaja a París y contempla sus murales. Joaquín publica su primer libro «Notes sobre Art», que recoge sus conceptos sobre la estética. Nace su segunda hija y él empieza a hacer sus primeros juguetes de madera de con sentido pedagógico. En 1917 publica su libro “Descubrimiento de sí mismo” y continúa publicando sobre arte. En este año sufrió un periodo de crisis donde decidió dejar atrás su arte evocador para centrarse en los problemas de su propia época y buscar un estilo diferente en su contexto actual, aquí es cuando él se convence de que “la pintura debe ser algo por sí mismo y no una imitación”
"La distorsión de los aspectos sociales, producto de exageraciones erróneas, provocan la “reacción del 17”, que implica una reconsideración de la relaciones individuales y sociales en beneficio de una universalidad buscada y no alcanzada”
Adolfo M. Maslach “Joaquín Torres García. Sol y luna del arcano"
 en referencia a la crisis de J.T.G

Los juguetes didácticos de madera que él mismo diseña y ensambla, pasan a una escala mayor de fabricación, aquí se refleja la habilidad que Joaquín adquirió de niño en el taller de su familia, sin embargo, su producción como negocio fracasa. Una sucesión de decepciones, junto con la incomprensión de Barcelona hacia su arte, hacen que decida irse a vivir a Estados Unidos.
J.T.G en su estudio. 1918
 Ya establecido en Nueva York con su familia, Torres debe intentar diversos trabajos e inicia con poco éxito diferentes actividades para conseguir una ocupación rentable. Joaquín pinta cuadros y trabaja en su libro de apuntes, donde refleja su fascinación por el ritmo y la condición de ciudad moderna. Sin embargo el artista se encontró con que a pesar de despertar su interés, era un ambiente tan excesivamente materialista que sus necesidades artísticas no encontraron lugar. Se marcha a Génova, Italia en 1922. 
A su llegada, comienza con la creación de una industria para comercializar sus juguetes, los cuales con el desarrollo de su empresa, son vendidos en Norteamérica y Holanda. Pronto, el régimen fascista italiano y la situación económica en descenso obstaculizaron la estadía de la familia en dicho país, después de dos años de trabajo, tuvieron que mudarse a Francia, pero aún sobre la zona de la costa mediterránea. Hay que tener en cuenta la situación social en la que estaba viviendo el artista: había una crisis de postguerra y la fragilidad económica, política y social se veía exteriorizada. 
Juguetes de J.T.G
En esta etapa de su vida, los juguetes son su manifestación plástica más prominente, se expresa esteoficio artesanal pero con una condición didáctica. El período del mediterráneo es una transición para Joaquín, donde a pesar de no haber obras significativas, se empieza a gestar un impulso nuevo a su obra y pensamiento. Su arte se mezcla en planos y volúmenes simples al retratar la arquitectura popular.
En 1926, la familia Torres-Piña se traslada a París. Al principio su condición no es fácil. Pero su arte comienza a obtener reconocimiento y su empresa prospera. Torres conoce a Theo van Doesburg y a Piet Mondrian. Su pintura adquiere ciertas influencias del fauvismo, el arte primitivo y el arte negro, pero ya para el año 28 se aleja de esta influencia y se interesa por la abstracción.

Aquí ya es cuando Joaquín Torres pinta sus primeras obras constructivistas. Se puede decir que es cuando él haya una concreción formal en su obra y la asociación definitiva con la modernidad. Su concreción formal se debe a que viviendo en París, pudo conocer a fondo tres movimientos artísticos, que proclama son aquellos en los que se apoya para la elaboración de su obra; el cubismo, el neoplasticismo y el surrealismo. Pero a su vez, su obra evoluciona a partir de éstos adquiriendo un carácter universal. Con sus estudios de relaciones geométricas trabaja la sección aurea y con el concepto universal de su arte crecen las bases del Universalismo Constructivo. Ya teniendo este impulso, intenta crear un museo constructivista, pero la propuesta no es muy bien aceptada.

Joaquín Torres García. Composición. 1932.
 “La figuración geométrica que realiza a através de la estructura y el símbolo le permite concretar postulados formulados por él en Barcelona. La universalidad parisina es terreno propicio para refrendar su acometida con la modernidad. En París, concretra su arte en estrecho apoyo con el cubismo, neoplasticismo y surrealismo”
Adolfo M. Maslach “Joaquín Torres García. Sol y luna del arcano"
Joaquín Torres García tiene 58 años y a pesar de atravesar una de las mejores etapas de su vida al tener un lugar importante dentro del arte parisino, la crisis económica de los años 30’s golpea también esta ciudad, el arte se ve afectado y Torres decide mudarse nuevamente con su familia a España.
Su periodo allí consiste en difundir las ideas teóricas que pudo hacer concretas en París y con un deseo pedagógico forma el “Grupo Constructivo” en pro del cual dicta varias conferencias. Pero la respuesta no es la esperada, el arte no ha evolucionado en España lo que lo hace aún peor. Torres responsabiliza al artista, pues considera está haciendo mal su tarea si se encuentra demasiado cómodo entre la psicología y el nivel cultural del pueblo. En uno de sus manuscritos él expresa su emoción al dictar una conferencia, pero su decepción al escuchar las reacciones:
“Al fin he dado mi primera conferencia. Fué una exposición de la cosmoplastia. [..] Al terminar alguien pidió para aclarar algunos conceptos. No hay inconveniente – contesté. Entonces ellos dijeron: Nos parece, tal arte que usted preconiza completamente desligado de la vida. Hoy los pueblos piden otra cosa que esté en relación con sus aspiraciones… -El arte ni sirve a nada ni a nadie, sino a sí mismo-” (Respondió)  Manuscrito de J.T.G 

Sin el reconocimiento del público y desengañado Cataluña, el artista decide viajar a América habiendo considerado México, pero al descartarlo se decide por su país natal. Torres llega a Uruguay en 1934 a la edad de 60 años y se encuentra con un país que asciende en el progreso económico en congruencia con la situación sociopolítica. Se radica en Montevideo y es recibido con entusiasmo. Escribe su autobiografía y continúa publicando sobre teoría del arte.
Joaquín Torres García. Monumento Cósmico, 1938
(Montevideo, Uruguay)

Ya en 1935 crea la A.A.C: Asociación de Arte Constructivo, a miras de contribuir con la cultura del país. Dictó prolíferas conferencias y publicó decenas de libros. Frente al panorama artístico de la ciudad que era más bien pobre, Torres reaccionó de manera positiva e intentó por medio de su obra mostrar a los habitantes un arte vivo frente a uno caduco. En 1938 construye el Monumento Cósmico Constructivo, una pieza en granito que sería la más relevante en el Universalismo Constructivo, posteriormente en 1945 publicaría su obra con el mismo nombre, que apuntaba a definir un arte americano pero con presencia universal. Así el periodo en Uruguay es una especie de síntesis de su obra y vida. El maestro Torres-García muere un 8 de Agosto de 1949, a los 75 años de edad. 

1874 - 1949